Registro mercantil y registro de la propiedad en Alemania

La seguridad de los Registros en Alemania

La actividad registral tiene como finalidad primordial la de garantizar la seguridad jurídica relacionada con el tráfico mercantil y los bienes inmuebles. Uno de los valores añadidos del Derecho Alemán es el de conjugar un sistema registral llevado por jueces y registradores que cumple con dicha función.

El Registro Mercantil (Handelsregister) se encarga de publicar la información relativa a empresarios individuales y sociedades, así como la referente a las personas que se encuentran en posición de representarlas en las transacciones comerciales. Ello supone un ahorro en los costes y requerimientos a abogados, que evitan tener que acreditar en todo momento su poder de representación.

El acceso al mismo es electrónico y público en la web www.handelsregister.de.

El Registro de la Propiedad (Grundbuch) goza de una gran transparencia, por lo que se facilita el tráfico jurídico sin necesidad de acreditar adicionalmente los títulos que ya constan en el Registro. Según un estudio de la Universidad de Harvard realizado en el año 2007, los costes en el ámbito de los derechos reales son menores en Alemania que en otros Estados, debido a la mencionada eficiencia y transparencia. Ello conlleva también un menor riesgo de fraude y de suplantación de identidad.

Garantías

La eficiencia registral alemana guarda una estrecha relación con el éxito en la garantía de los créditos. El Registro es utilizado como forma de garantizar al acreedor el cobro de su crédito mediante la constancia registral del mismo, que conlleva la realización del crédito en caso de incumplimiento con preferencia respecto de otros acreedores.

Su aplicación es frecuente en el ámbito de las hipotecas. Se trata de un recurso especialmente empleado por los bancos, que supone la garantía del crédito en condiciones e interés más favorable que el establecido en otros estados.

El llamado bono bancario “Pfandbrief” supone una herramienta mediante la que el inversor no depende únicamente del banco emisor, sino que en caso de insolvencia del mismo, el Estado le garantiza el crédito mediante los llamados activos de cobertura o “Deckungsmasse”.

Las garantías no sólo se conceden respecto de bienes inmuebles, sino que también existen sobre los llamados bienes muebles. Un ejemplo de ello es el derecho de reserva de dominio (Eigentumsvorbehalt) que se concede al propietario de un bien que lo enajena a plazos, mientras no le sea satisfecho totalmente el crédito. Mediante una “reserva de dominio prolongada”, no se produce únicamente efecto frente a las partes contratantes, sino que en derecho alemán se puede extender también a terceros.

Otra de las garantías es la llamada “propiedad de seguridad” (Sicherungseigentum), según la que el acreedor puede constituirse como propietario de una parte de los bienes del deudor como garantía del crédito, siendo que el deudor puede seguir utilizando esos bienes aunque, en caso de insolvencia, el acreedor tendrá preferencia respecto de otros acreedores en el acceso a dichos bienes.

Esta garantía supone para el acreedor una garantía mayor que la que ofrecen otros ordenamientos jurídicos, puesto que permite perseguir los bienes objeto de la garantía incluso cuando se encuentren fuera de la posesión del deudor.

Asimismo, el derecho alemán prevé la asignación de bienes como garantía, en el sentido de que el acreedor puede condicionar la concesión de un crédito a la asignación de parte de las ventas que con la ayuda de dicho crédito consiga el deudor.